una semana sin vacaciones y el cuerpo me ha dicho basta. comenzó un dolor en la espalda el dÃa miércoles que hoy, como si fuese normal, me impedÃa respirar (sin sentir dolor). mi doctora de cabecera (de la verdadadera) me diagnosticó angustia, me dio una infusión relajante, me frotó la espalda y me hizo dormir. desperté mejor, pero bastante anestesiada.
básicamente no tomo medicamentos analgésicos por miedo. miedo a no sentir nada, a no darme cuenta de lo que me pasa. hasta ahora he sido lo suficientemente bruta (incluso creo que lo sigo siendo) como para no sufrir fÃsicamente demasiado.
pero asà es como llegan los 32 años (y sé que aún es temprano como para alarmarse) y te vienen estas literales puñaladas por la espalda que en realidad son yo misma diciéndome que corte el rollo. no eres funcional, habitúate a la disfuncionalidad capital, no podrás con ella, padeces la enfermedad de la desadaptación. en fin, no pasa nada. una enfermera, una infusión, dos horas de sueño, mucha comida. y un post. escuchar la calle ruidosa que tengo abajo, meter las manos en una maceta de vez en cuando. fumar. volver al mes que ha pasado, un ciclo hormonal que dejé pendiente porque no cabÃa en el calendario, las 42 pestañas que ralentizan mi rendimiento informático, los buenos modales.
porque, es signo de muy mala educación padecer dolores. algo de mal gusto.
estuve 3 semanas sin estar en internet y no pasó nada.
estuve en un local de salvajes recién empotrados al mundo a través de un trozo de agua con tierra alrededor.
para hacer vacaciones los seres humanos pueden ir al decathlon y comprar por 100 euros un pasaporte al vacacionismo consistente en una mochila, una tienda de campaña y un saco de dormir. todo obsolescencia programada, si algo se rompe será parte de la aventura.
mi diana es una estupenda guÃa/diosa/compañera. lo hace con amor.
leo las crónicas añejas de lo que henry miller vivió hace más de 60 años en un lugar parecido, o similar, o de geografÃa coincidente. él confunde los planos de realidad. por ejemplo, su vida en nueva york, su estancia en parÃs, los autores que lee. omite siempre describir a hombres y mujeres con las que ha follado. américa se le solapa, le asusta por oposición. henry miller ha viajado en los años 40 y ha permanecido un año sin escribir. mi letargo ha sido de 15 dÃas y la asepsia, además de escritural, ha sido eminentemente electrónica. me pregunto si habrá cambiado mi caligrafÃa, al menos parece más desordenada.
la actividad onÃrica sufrió un despliegue inusitado. culpa del aire acondicionado el destape, aparecen trazos discontinuos de conversaciones interrumpidas, mails de respuesta que aún no envÃo, y que respondà personalmente en sueños. casi todos los seres humanos que conozco (o que considero) aparecieron en encuentros nocturnos. también algunos que no conozco. también algunos nunca aparecieron. todo llegó a tener tintes mortales al resumir muchas etapas con una anarquÃa totalmente ajena a las consecuciones lógicas de una vida humana. el aire acondicionado primero, la playa virgen prosiguió el onirismo como si hubiese sido un exiliado de la red, y por supuesto, me abandonó mucho antes de empezar a escribir esto.
quizás lo más interesante y extremo haya sido estar en la playa salvaje, donde el cuerpo aprende mucho más rápido sobre cuándo hacer las cosas. dormir, comer, respirar se vuelven asuntos fundamentales. los minutos están llenos de cosas básicas y lisas, los movimientos pierden compostura. el horario se supedita y deduce de la luz. el código se reduce al binario agua/tierra. también es cyborg lo que se vuelve bestia. todo se dilata.
no sé si he vuelto más fuerte y poderosa, pero sà más tranquila. algo que intento mantener como una arquitectura precaria, arruinada en medio de un paisaje de fuegos artificiales.
Monthly Archives: septiembre 2011
sesión naif de reencuentro eróticonanista con mi ordenador y su webcam
por ahora he vuelto, y sólo he tenido horas para comer y retomar el contacto con mi máquina. los frustinis son productos del taller que hizo ivana en el ladyfest, y los he probado hoy con titanium. durante los próximos dÃas espero subir mis parciales impresiones del viaje, todo un baño tibio…
PAUSA
…pero volveré, espero que más grande y poderosa.